Pensándolo bien, o quizás no tan bien, creo que tiene sentido escribir un (pequeño) texto a nombrar como ‘Manual Práctico de Metodología Cuantitativa’. Hasta ahora los capítulos que se me ocurren son los siguientes -con la idea, obvio, de empezar a escribirlos como entradas en el blog:
- Para tomar buenas decisiones metodológicas, lo que se necesita es saber del tema, no de metodología
- Cuando mide de forma distinta un objeto, de hecho no está midiendo el mismo objeto
- No se preocupe de la validez, preocúpese de la fiabilidad
- Las únicas mediciones con sentido son las que cuentan objetos; los índices complejos no sirven para nada
- El sesgo no existe, sólo los malos análisis
- Los únicos resultados que pueden ser de verdad son los que salen a la primera. Los análisis complejos sólo sirven para desechar ideas, nunca para fundamentarlas
- Piense en lo que las personas pueden contestar, no en lo que a usted le interesaría saber
- Las preguntas de alta precisión suelen ser poco fiables
- Los datos requieren interpretación y sus datos siempre serán mal interpretados
Eso es lo que hay por ahora. Mañana habría que empezar a escribir.
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